viernes, 15 de junio de 2018

Noche de brujas

Pintura de Bronisław Linke
Quiere volver a tocarme
con manos hechas de sangre.
No espera para llenar el vaso,
pues envidia el fin y cree
que ella cruzará el otro lado.

La odio al grado en el que me ha encadenado,
aunque no recuerde ya mi nombre,
mi verdadero nombre,
perdido en la noche que nunca termina.

No comprende el laberinto,
mi cadena de escarlata, piel de luna,
no comprende el laberinto.

Mira hacia poderes fuera de sí
para someter en su ansia impostada
que alguien ha puesto en su interior.

No ve al necio encaramado a su espalda
cuando detiene mi corazón
con su espasmo carmesí.

La verdad regresa a mí
a través del túnel circular.
Sé que volverá a ocurrir
porque la farsa nunca termina.

domingo, 29 de abril de 2018

El horizonte


Por las tardes, querría veros lejos
de la caricia vespertina,
del amor perezoso,
lejos de la invitación a la tumba.

Querría veros alzados,
la antorcha dispuesta
a encender las hogueras,
preparados para asaltar el horizonte.

miércoles, 21 de marzo de 2018

La tumba


Que no he mirado tu tumba, niña,
ni miré tu espectro marchito
que todos los mares agita;
el espejo palidece ante la luz
que se disuelve y se resuelve
frente al ojo que recorre el cielo
y navega bajo el río silente.

jueves, 1 de febrero de 2018

El señor del tiempo


Y el señor del reloj habló
con lengua constante de tiempo;
mentía, por supuesto, a los hombres
cantándoles sobre su finitud:
las horas quemadas,
las distancias tomadas,
el patrón para fijar su esclavitud.

viernes, 2 de junio de 2017

La sirena en el agua

Pintura de Zdzisław Beksiński
La sirena está en el agua,
pero no canta.
La sirena está en el agua,
pero no nada.
La sirena se arrojó al mar,
para acallar la angustia de vivir en tierra.
La luna riela sobre ella,
la tiñe de plata y fantasma; 
la besa.

El ahogado la abraza, llora y grita,
cubierto a medias por la corriente,
mientras las olas disuelven
el cuerpo de una sirena de agua.
Oh, sí, él grita,
exactamente
como lo hacen las serpientes.

lunes, 3 de abril de 2017

La prisión


Siente cómo se amontona lo suave,
con susurro de placidez.
Cómo desarma, cómo destruye
el resto de lo noble a través de su peso.

Lo suave nos ahoga con caricias
y con la ausencia de caricias:
envenena el interior,
quiere que dejemos la visión del astro
a cambio de sus momentos pasajeros
que devoran el corazón.

martes, 1 de noviembre de 2016

La manera del relámpago


Lo volveré a decir:
no a los amores pequeños.
O el Eros o la nada;
lo burgués caduca pronto
y lo proletario descompone
hasta desembocar en el paria.

Buscamos amar el mundo
a la manera del relámpago:
en vertical, para atravesarlo.